Paisaje del mundo al revés, dijiste
nada está donde fue creado,
es un destierro sin día y sin noche,
y la luz parece sólo un pequeño delirio de la oscuridad
No es tiempo de parques ni de infancias,
ni hay suelo sobre el que sentarse a leer.
Quedan puertas abiertas en aceras desconocidas,
y ventanas con vistas a la primera tormenta de verano,
presencias inexactas, frases oídas a los caminantes,
olvido cosido con cuidado a los tobillos,
y en cada herida ha crecido, frágil, el azul